Amor y conveniencia

La diferencia entre alguien que no sabe amar y alguien que no quiere hacerlo contigo

es simple. Hay personas que sí se entregan, pero solo cuando todo gira a su favor.

Cuando amar implica ceder, adaptarse o sostener al otro, empiezan a desaparecer.

No porque no puedan amar. Porque ahí ya no les conviene. Por eso a veces

son intensos… y luego, de la nada, se enfrían. No es que no sepan

amar. Es que amar contigo ya no les compensa.