La desaparición de Martín

No puedo parar de revolcarme en la cama, me estoy volviendo loco.

En cualquier momento van a forzar la entrar de mi casa con el objetivo de asesinarme.

O peor aún, de torturarme. No puedo soportarlo más, tarde o temprano

entraran y me siento plenamente culpable. Como pude haberlo abandonado de aquel modo MIERDA.

Ya están aquí, lo presiento, no hay escapatoria alguna. Solamente me queda

agarrarme la cabeza y pensar si es posible desvanecerme. Debería desaparecer, eso es lo que necesito.

Desaparecer como aquel día desapareció Martin, juro que yo no tengo nada que ver.

Era mi mejor amigo, con el pasar del tiempo su rostro se va difuminado de mi memoria.