La vaca culpable de Chicago

Una ciudad se quemó por completo y dijeron que fue culpa de una vaca.

Chicago 1871. Una noche normal se volvió fatal. El fuego empezó sin aviso

y nadie lo pudo controlar. Las llamas crecieron sin freno. Calles enteras desaparecieron.

Mientras todos buscaban razones, un culpable rápido eligieron y señalaron al

establo sin pruebas ni explicación. Una vaca pateó una lámpara.

Y nació la acusación. Con los años nadie lo confirmó. La historia empezó

a dudar, pero el mito ya estaba hecho. Y a la vaca nadie la

pudo salvar. Nadie la pudo salvar. Moraleja de esta canción,