De la expansión al poder nuclear

Estados Unidos pasó de robar tierras en el oeste a detonar bombas nucleares en apenas cien años.

Todo arrancó con la idea del Destino Manifiesto, desplazando a los nativos para conectar

las costas con ferrocarriles. Después vino la era de los magnates como Rockefeller que se hicieron

millonarios a costa de los trabajadores, hasta que la Gran Depresión golpeó durísimo.

Pero nada se compara con la Segunda Guerra Mundial tras el ataque a Pearl Harbor. Desde el desembarco

en Normandía hasta el horror del Holocausto, el mundo cambió para siempre cuando el Proyecto Manhattan

soltó la bomba atómica, dejando claro que el poder absoluto tiene un costo terrible.